El jardín de los ibones de Anayet es el lugar que cualquier montañero elegiría para pasar una noche de vivac en la montaña pirenaica: es la pradera perfecta, con hierba, lagos, picos que parecen pirámides de colores y sin demasiadas complicaciones de acceso. La ruta habitual por el Valle de Canfranc sube por la Canal Roya siguiendo las marcas del GR-11.
El valle de Canal Roya es un modelado glaciar impecable cerrado por las paredes de La Rinconada. En la muralla suele aparecer una cascada en época de deshielo que cae del desagüe de los lagos. El sendero sube por unas zetas algo empinadas y entra en la gran caldera volcánica de los ibones de Anayet, el país de las maravillas.